LA NOVEDAD ¡CIUDADES COMUNALES¡

La “innovadora propuesta” de crear en Venezuela ciudades comunales, sorprende a muy pocos, ya que desde hace años se viene ofreciendo la idea de implementar las mismas, por parte de un régimen que desde hace tiempo carece de ideas. Los venezolanos hemos visto como han sido muy creativos para la destrucción, pero muy ineficiente para la creación o construcción.

Esta figura, como muchas otras cosas que han intentado imponer en nuestro empobrecido país, proviene de fuera, es importada de regímenes comunistas, que las implantaron en la primera mitad del siglo pasado y resultaron un verdadero fraude. Fracasaron en la Unión Soviética, en la China de Mao, en Vietnam, en Camboya (rebautizada como Kampuchea), entre otros dolorosos ejemplos.

Nos preguntamos qué significa crear una ciudad comunal. El primer paso deberá ser la creación de las comunas, para lo cual, el régimen ya ha creado desde hace algún tiempo, una figura que denomina los Consejos Comunales.  Las cuales, a pesar de recibir numerosos beneficios económicos y sociales, no han logrado consolidarse y sobreviven como mecanismo político de control social, principalmente a través de la distribución de las cajas de alimentos denominadas CLAP, en medio de las constantes denuncias de abusos y corrupción.

Al frente de estos Consejos Comunales se encuentran militantes del partido del régimen, el PSUV. Sin embargo, han ocurrido casos, que alguien no vinculado con este partido, logra ser electo por los vecinos al frente de algún consejo, este es inmediatamente intervenido y sustituido por un comisario político. Debido a que esta instancia también es utilizada como mecanismo de proselitismo de los partidos del régimen.

Suponemos que, una vez logrado el objetivo de crear suficientes Consejos Comunales, los mismos se unirán para conformar la “ciudad comunal”. Luego, en el paso siguiente, debe ser la desaparición de los Concejos Municipales, ya que, en la Ley propuesta, que circula por diversos medios y redes, se indica que las competencias del nivel municipal son asumidas por los concejos comunales.

 Así que no resulta difícil imaginar el resultado que se obtendrá en las “nuevas ciudades comunales”, como consecuencia del manejo, por parte de militantes de los partidos políticos que apoyan al régimen. Pensemos que pasará con los asuntos relativos a los servicios públicos, vialidad, aseo urbano, cobro de patentes, impuestos a las viviendas y vehículos, medio ambiente, etc.

En este sentido, con esta “nueva instancia “, se elimina la democracia representativa. Para justificar este retroceso, se trata de vender el espejismo de democracia directa. Cuando la realidad es que, al frente de estas ciudades estarán funcionarios que responden, directamente, a los intereses del poder central. Acabando de esta forma con los procesos de descentralización.

Finalmente, mientras en Venezuela continuamos retrocediendo hacia los inicios del siglo XX e incluso antes. En el siglo XXI, en Naciones Unidas y en los países desarrollados se está trabajando en la creación y planificación de las ciudades inteligentes, que permitan lograr los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Ciudades cuyos recursos sean bien administrados, en las cuales, se implementen sistemas multimodales de transporte público y se incentive el uso de energías verdes verdes y que finalmente, sean amigables y marchen al desarrollo integral. 

Actualmente, a nivel internacional el debate sobre el futuro de las ciudades es sobre otras cosas, como, por ejemplo, la implementación y utilización de La red 5G para la seguridad en las ciudades o la utilización de tecnología que permite al transporte público funcionar sin conductores, el combate a los tipos de contaminación ambiental, incluyendo la visual y sónica.

En Venezuela las preguntas son: ¿Regresamos al siglo pasado?, ¿Tendremos la capacidad de soportar otro fracaso más? ¿Los intereses ideológicos privan sobre los intereses de la población? ¿Hasta cuándo seguimos actuando producto de la improvisación y del ensayo y error?