ISRAEL Y HAMÁS, ¿UN NUEVO CONFLICTO REGIONAL?
El pasado 7 de octubre, vivimos un nuevo capítulo de esta historia de violencia entre Israel y el grupo Hamás. Esta vez, se produjo el ataque sorpresa del grupo Hamás a la frontera sur de Israel, un evento bien planificado, desde tierra, aire y mar, donde la barbarie fue el elemento central de la acción, se asesinaron mas de 1.500 personas, en su mayoría civiles, muchos jóvenes, mujeres y niños, personas que no tenían nada que ver con el conflicto. En este acto terrorista, también secuestraron un numero que se estima en mas de 220 personas, entre civiles y militares, los cuales fueron llevados a la Franja de Gaza, con varios fines: Para usarlos como rehenes en una posible negociación con Israel Como elemento de disuasión en caso de la esperada incursión militar en el terreno En ultimo termino, para usarlos como “escudos humanos” ante la ofensiva terrestre de las fuerzas militares de Israel. Es importante recordar que Hamás, es la organización que gobierna en Gaza, desde 2007, pero no es el representante oficial de los palestinos. Este grupo es considerado terrorista por Estados Unidos y la Unión Europea. Hamás, no reconoce a Israel, ni la Autoridad Nacional Palestina (ANP), quien es el representante oficial de Palestina, reconocido por la comunidad internacional y es quien gobierna en Cisjordania, ejerciendo la presidencia a través de Mahmoud Abbas, el cual, asumió el poder luego de la muerte de Yasser Arafat en el 2004. La respuesta de Israel no se ha hecho esperar, su Fuerza Aérea bombardea el norte de Gaza diariamente, destruyendo edificios y túneles, argumentando que son centros desde los cuales Hamás y la Yihad Islámica, que es el otro grupo que participo en el ataque al sur de Israel, lanzan periódicamente sus cohetes y misiles. Por su parte las fuerzas armadas de Israel, ante la inminente incursión terrestre han solicitado a la población civil palestina, que se trasladen hacia el sur de la Franja de Gaza, lo cual ha agravado la crisis humanitaria. Es una situación difícil de enfrentar ya que existen intereses muy diversos, entre los distintos actores que están involucrados en este conflicto. Por parte para Israel, se trata, de un tema de supervivencia como Estado, ante las constantes amenazas a sus fronteras, en el norte con Líbano, donde la milicia de Hezbolá, apoyada y fianaciada por Irán y por el sur desde Gaza, Hamás, la Yihad Islámica y otros grupos actúan con el único objetivo “borrarlo del mapa”, como lo ha planteado desde hace varias décadas Irán. Ante esta amenaza, la prudencia es un factor fundamental, ya que no hay una respuesta única a las muchas interrogantes que se generan, como por ejemplo: ¿Tiene Israel derecho a la defensa?, ¿Es desproporcionada la respuesta de Israel?, ¿Cómo y quién financia a Hamás?, ¿Por qué Egipto cierra la frontera con Gaza y no permite la salida de los Palestinos que huyen de la guerra?, ¿Qué organización tiene el mayor reconocimiento de entre los palestinos, Fatah o Hamás?, ¿Hezbolá atacará a Israel y se unirá al conflicto?, ¿Cuál será el rol que asumirán la mayoría de los países árabes?, ¿Se involucrará directamente Irán, en el conflicto? El reto de la diplomacia, es evitar que el conflicto escale y se extienda al resto de la región, ya que las consecuencias pueden ser muy graves.